San Cristóbal, República Dominicana – Poché Ramírez, aspirante a senador por la provincia de San Cristóbal, expresó su preocupación sobre la influencia de la oligarquía en República Dominicana y el manejo de la crisis migratoria haitiana.
En una reciente declaración, Ramírez subrayó que la oligarquía dominicana «no es dominicana», a diferencia de la haitiana, lo que, según él, debilita el control del país sobre la inmigración.
Ramírez afirmó que las autoridades utilizan el tema migratorio como distracción, exacerbando la situación cuando hay crisis económicas.
Aseguró que las deportaciones son «chantajes» y que, a menudo, los migrantes haitianos deportados regresan al país sin problemas.
Además, criticó al gobierno por permitir estas irregularidades mientras las autoridades supuestamente lucran con los migrantes.
El político también cuestionó la actuación del presidente, argumentando que la situación migratoria se ha manejado de forma deficiente, y que las decisiones tomadas con respecto a Haití responden más a intereses externos que a los nacionales.
Criticó el uso de medidas populistas que solo buscan «distraer» a la población dominicana.
Por otro lado, Ramírez planteó la necesidad de un control más firme de las fronteras y un mayor respeto entre ambas naciones, pero insistió en que cada país debe mantener su soberanía.
«Tenemos que separarnos, respetar nuestras fronteras y vivir en paz como dos naciones», dijo.
El aspirante concluyó sus declaraciones señalando que las medidas adoptadas en el pasado, como el cierre de la frontera por la construcción de un canal haitiano, no fueron efectivas, y que la solución al conflicto con Haití no puede depender de una oligarquía que, según él, no tiene un verdadero compromiso con la República Dominicana.