Max Puig dice que en la campaña hay desequibrio frente al uso de recursos
El candidato presidencial del Partido Alianza por la Democracia (APD), Max Puig, criticó las condiciones desiguales en que se ha desarrollado la actual campaña electoral, que según afirmó ha sido de acusaciones y desequilibrada respecto al uso de los recursos económicos y logísticos.
Cuestionó que contrario a lo esperado, la campaña haya sido de denostaciones y detractacionies entre los dos principales partidos y candidatos, en vez de propositiva, como dijo que lo ha hecho en el contacto con los electores.
Entrevistado en El Gobierno de la Tarde de la Z101, manifestó que en algunos candidatos ha priumado la denostación, la campaña sucia y la acusación de cual es o ha sido mas corrupto, por lo que estimó que ha caído en muy bajos niveles.
Puig dijo que ha reclamado a la Junta Central Electoral (JCE) que intervenga y haga uso de sus facultades que les da la ley, para que se establezca cierto equilibrio, pero lamentó que no haya sido de esa maneera.
Valoró de positiva la labor que ha realizado el organismo electoral en materia organizativa, pero insitió en que no garantiza la equidad con respecto a los partidos políticos.
Como elemento negativo de la campaña, señaló la violación al Pacto por la Civilidad, firmado por los seis candidatos presidenciales, el cual aseguró que fue violando estadno fresca la tinta conque fue rubricado.
Cuatro grandes desafíos
Puig citó cuatro grandes desafíos que tiene la sociedad dominicana, los cuales prometió que afrontaría de ganar las elecciones y asumir la Presidencia de la República.
Esos desafíos son la desigualdad social, el problema ambiental, la seguridad ciudadana y el fortalecimiento institucional.
Respecto a la desigualdad social, el candidato presidencial de la APD dijo que ésta continúa profundizándose en la sociedad dominicana, pese al crecimiento económico y la estabilidad macroeconómica.
Indicó que mientras la situación de pobreza se profundiza, el crecimiento económico hace más ricos a los que tienen más y más pobres a quienes menos tienen.
Opinó que las riquezas del país se han quedado en muy pocas manos, generando mucha pobreza.
Respecto al problema ambiental, Puig, quien fue ministro de Medio Ambiente, advirtió que los recursos ambientales se agotan de manera peligrosa, por la contaminación de las aguas y la forma como se manejan .
En cuanto a la seguridad ciudadana, consideró que el gobierno que surja debe afrontar la inseguridad reinante entre los ciudadanos, que viven temerosos, enrejados y con miedo, por lo cual entiende que es uno de los desafíos esenciales que se deben afrontar.
Con relación a la institucionalidad, dijo que sería un aspecto esencial en su gestión de gobierno, debido a la desconfianza reinante en el país hacia las instituciones que deben velar por el cumplimiento de las leyes y de la Constitución de la República.
Argumentó el hecho de que en la sociedad hay desconfianza en la Policía, los políticos y las instituciones, así como en los legisladores.
Lanzó duras críticas contra los congresistas, a los que acusó de corromperse con la entrega del llamado “barrilito”, por considerar que fueron electos para legislar y ser garantes de la institucionalidad democrática, no para hacer asistencia social.
Puig planteó la necesidad de que se ponga coto a la corrupción y a la impunidad, para lo cual consideró que desde el Gobierno deben darse señales de actuación, a fin de que se actúe con fortaleza ética y moral ante el flagelo y sus generadores.
Orientacion de izquierda
Max Puig estimó que para enfrentar los principales problemas del país, la sociedad necesita de transformaciones y de un cambio de modelo, por lo cual consideró que ese giro debe ser hacia la izquierda, aunque no enmarcado necesariamente en los modelos latinoamericanos.
Recordó que los partidos Revolucionario Dominicano y de la Liberación Dominicana, que se han repartido el poder en las últimas décadas, surgieron como fuerzas que procuraban la transformación de la sociedad, y como precursor de ese modelo surge el gobierno de Juan Bosch en 1962, quien luego fundó al PLD.
“Esos partidos han pasado de izquierda y centro izquierda a la derecha y a aplicar politicas deEstado diferenciadoras de sus orígenes, y hoy se han convertido en conservadores”, sostuvo.
Propugnó porque las estructuras social y política sean modificadas, para darle solución a los grandes problemas de los dominicanos.
“Los desafíos se enfrentarán con seriedad cuando se tenga un gobierno con una tónica progresista”, enfatizó Max Puig.
Coincidencias con empresarios
Al enfocar el modelo de gobierno que aplicaría la APD ante el empresariado, Puig dijo que su concepto sobre la transformación económica y social coincide el del Consejo Nacional de la Empresa Privada, los industriales e inversionistas.
Expresó que lo fundamental será poner las reglas claras y brindarles seguridad a los inversionistas, ya que no se sienten confiados en los políticos, porque les cambian las reglas de juego.
En ese orden, manifestó que son los mismos empresarios que reclaman cambios en el modelo económico, por la inseguridad y porque desde las mismas estructuras del Estado compiten con ellos y se sienten amenazados.
Enfatiozó que los empresarios lo que requieren es una sociedad de justicia social que les dé mayor seguridad a sus inversiones y riquezas, un modelo que genere empleos productivos e impulse la producción y las exportaciones.
Barrick Gold
Con relación a la explotación minera que realiza la Barrick Gold, advirtió del peligro de que se realice en las alturas, debido a que República Dominicana está situada en una isla y afectaría su ecosistema.
No obstante, destacó el hecho de que la firma canandiense utilice el sistema de autoclave para la extracción del oro, que consideró más avanzado y menos peligroso que el de explotación a cielo abierto, como el que implementó la Rosario Dominicana.
Favoreció la explotación mineral, pero planteó la necesidad de que el Estado ejerza mayores controles sobre quienes la realizan y el país se suscriba al Convenio o Código sInternacional sobre el Cianuro, de manera que haya mayor supervisión internacional sobre la explotación minera.
Manifestó que para la explotación minera hay aspectos técnicos y financieros a tomar en consideración.
En la parte técnica, observó que se tome en cuenta que para producir el oro se usa cianuro, que es un químico de alta peligrosidad, que en el caso la Barrick Gold se ha resuelto con las autoclaves, pero que requiere de superisión internacional.
En el aspecto fianciero, favoreció que a la empresa minera se le establezcan precios topes para las exportaciones del oro y demás metales extraídos de los sulfuros, a fin de que el Estado salga mejor favorecido de esa actividad minera.
No obstante, dijo que toda modificación en torno a la actividad minera en el país, debe realizarse en base a reglas y leyes internacionales vigentes.
Migración haitiana
Con relación a la migración haitiana hacia República Dominicana, el aspirante presidencial de la APD abogó porque se establezcan fronteras reales y sean debidamente cuidadas, a fin de que las dos naciones definan con claridad sus relaciones.
No obstante, argumentó que no puede haber fronteras donde hay corrupción, al sostener que el grave problema es el flujo migratorio sin controles por ambas fronteras.
Opinó que la migración masiva de haitianos hacia República Dominicana se solucionaría con acciones institucionales que enfrenten la corrupción a ambos lados.
Sin embargo, manifestó que el país no puede desentenderse de Haití, porque comparten fronteras y es imposible evitar el flujo de haitianos hacia territorio dominicano, por razones económicas.
Adujo que por ser la economía dominicana seis veces más rica que la haitiana, es natural que el haitiano emigre hacia la parte Oeste de la isla.