Su estrategia de inalcanzable le sigue funcionando a Luis Miguel, quien se se despidió de República Dominicana sin decirle “ni pío” a un público que tuvo que volver a su show esta noche, luego de que ayer se pospusiera su presentación por un “imprevisto técnico”.
En ese sentido, Micky gesticuló agradeciendo, sin expresar fonéticamente media palabra pero tampoco fue necesario, porque a sinceridad “El Sol de México” brilló.
Al momento de amenazar con despedirse, en eso de las diez y media de la noche, el artista esparció besos por el aire, y emocionado ante la fanaticada que aclamaba su nombre y solicitaba “otra canción” de manera reiterada, en medio de una danza de fuegos artificiales, Luis Miguel lucía cansado y sudado pero pleno y agradecido por el respaldo de su público.
Con fuegos artificiales, el ánimo de los fanáticos complacidos por el cielo, culminó el show sobre las 10:35 con fuegos artificiales y un artista sudado y cansando de tanto cantar y sudar. Sin dudas, una estrella, una leyenda vida.